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Coronavirus. ¿Habrá nota sobre algún evento presencial que no lo mencione? Creo que no.

Y no es para menos. De un momento para otro, sin que nadie lo espere, nos cambió la vida. La forma de salir, de saludar, de relacionarnos, de mostrar afecto. De vivir.

El domingo pasado, luego de todos estos meses de confinamiento y cuidados, pude finalmente presenciar un evento otra vez. Obviamente, al aire libre, con barbijo el 100% del tiempo y manteniendo distancia. Pero la forma en la que me recargó las energías, con ese clima perfecto que parecía darnos la bienvenida a esta nueva etapa, fue impagable.

Sin más preámbulos, bienvenidos a la exposición de arte automotor “De Autos y Héroes”.

Arte, autos y aire libre

Este evento fue organizado por la Asociación Amigos del Paseo Fangio junto al grupo de artistas FUEL-ART (los pueden encontrar en Instagram y Facebook) y rinde homenaje a los protagonistas de las Temporadas Internacionales del Automóvil Club Argentino entre los años 1947 y 1951.

Por si esto no fuese suficiente historia, también hubo una gran variedad de obras relacionadas con la vida deportiva de Juan Manuel Fangio, inspiración fundamental en la mayoría, por no decir todos, los que se reunieron el pasado domingo en el Paseo Fangio.

Sobre estas líneas podemos encontrar parte del equipo de FUEL-ART, protagonistas indiscutidos del evento. De izquierda a derecha: Mario Tagliavini, Hernán Delannoy, Miguel Paolantonio, Claudia Rizzoli, Agustina Montserrat, Jorge García, Daniel Sonzini, Rafael Varela y José Luis Zaccaria.

Pero ustedes quieren ver el arte. Lamentablemente aunque he sacado varias fotos en el evento, no tengo fotos que me gusten de todas las obras, por lo que me concentré en las fotos que realmente me gustaron.

Si quieren ver todas las obras, pueden visitar la galería virtual, o bien pasar a saludar en el próximo evento 😉

Sin más preámbulos, vamos al arte (y si quieren ver las fotos más grandes, pueden pasar por mi galería).

No solo de arte vive el evento

Como mencioné anteriormente, si bien el arte fue el motivo principal de la juntada, hubo una cantidad de acompañantes con ruedas muy interesante.

No voy a mentirles: mis favoritos fueron el IKA Torino 380W Número 2, uno de los 3 protagonistas de la hazaña Argentina en las 84 horas de Nürburgring de 1969, y una réplica del Alfa Romeo GP Tipo P2, por lo que los verán como foco principal en mis fotos.

Pueden encontrar todas las fotos del IKA Torino 380W #2 en grande en esta galería.

Pueden encontrar todas las fotos del Alfa Romeo GP Tipo P2 (réplica) en grande en esta galería.

También presente estaba Martín Glas, investigador y autor de libros relacionados con el Torino, presentando su último lanzamiento: “Cuando los tres Torino volvieron a Alta Gracia”. En el mismo relata la celebración en la ciudad cordobesa de Alta Gracia, realizada en Agosto de 2019.

Muy agradable Martín, y siempre dispuesto para una charla. Me contó un poco de la historia y cronología de los libros, la atención al detalle y precisión de los datos, hablamos sobre las ilustraciones que acompañan las páginas y el ilustrador de las mismas (un jóven de Chile que ahora trabaja nada menos que para Pininfarina Shanghai), e incluso cómo algunos de los hijos de Mario Tagliavini estaban sorprendidos (en su inocencia de niños), por el hecho de que autos tan importantes y con tanta “guerra encima” como el Torino #2 de 1969, estén en expuestos limpios.

Si quieren conseguir los libros de Martín, pueden visitar su página web acá. Yo me compré 3 y como coleccionista de libros, los recomiendo. Muy lindo relato y excelente calidad de producción y encuadernación.

Palabras finales

Lo que estamos viviendo es muy extraño. Y ese es el motivo por el cual disfruté tanto de este evento. Saludar, aunque sea con choque de puño, a gente fuera de mi entorno cercano, y poder volver a sentir un poquito “que todo está bien” (o al menos, no tan mal) es casi rejuvenecedor.

Fui puntualmente a visitar y conocer a dos artistas, Migue y Dani, “amigos virtuales” (en cuanto a que no nos conocíamos previamente, pero interactuábamos mucho via Twitter gracias al intercambio de apoyo por nuestro arte), y me fui con una sonrisa de oreja a oreja, aunque nos debamos la foto.

Haber podido conocerlos y ver sus obras, y las del resto de los presentes del equipo de FUEL-ART, en vivo, realmente es otra cosa.

Por más fotos lindas, edición y demás que uno pueda compartir con las mejores intenciones de transmitir lo que se vive, no hay nada como lo palpable y tangible. Eso que te deja ver cada detalle (y cada imperfección, como temía Migue), cada pincelada, intención, actitud y expresión. Eso que le da el toque humano a la representación del corazón.

Eso es arte.

Si llegaron hasta acá, ¡muchas gracias! Espero que les haya gustado el relato. ¿Qué parte les gustó más? ¿Qué foto es su favorita? ¿Cuál es su artista preferido? Los leo en los comentarios.

Si quieren interactuar y ver mis obras (ilustraciones y fotografía) a medida que se publican, pueden seguirme en redes sociales:

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